Y es así que se fue, una etapa importante en mi vida. Mi vida, lo máximo que conocí en estos años: el colegio. Mi propia selva, mi propia ciudad. Entre pasillos y columnas se escuchan esos pasos, se sienten las miradas que dejé, las risas, las lágrimas de capricho, los bancos escritos, el kiosko, los nervios en los exámenes.13 años de mi vida en un mismo edificio, con las mismas caras, algunas conocidas, otras no tanto, otras que te conocen mas de lo que pensás.
Crecer, lo que la vida significa, y es ahí mismo donde lo hice. Otra vez hoy, me ví sola, subiendo y bajando escaleras. Siempre así - me dije. Sola, pero no sinónimo de maldad, de poca amistad o de otra ocurrencia. Sola porque así disfruto de lo pequeño, para después entrar al aula y otra vez las risas, los mates prohibidos, las galletitas, las guerras de lápices, un abrazo, un chiste.Hoy me despido de mi mundo, con la mayor felicidad que los fantasmas no me dejaban tener. Hoy dejé de aterrarme de recuerdos para decir adiós a lo que estos años significaron, y a los recuerdos que no quiero también, adiós. Me voy feliz, porque se que se viene lo que tanto esperé, lo que me gustaría que pudieses ver desde arriba, lo que mi familia apoya, lo que mi amor banca. ¡Se viene lo mejor!