Mandando mensajes al infinito a seres que habitan pero no habitan, mensajes que no sabría si llegarían, porque son años luz, porque no hay remedio. Igual como te lo dije cuando el semáforo me quemaba los ojos mas que ver tus lágrimas: He pasado por suficiente, me han fallado y he fallado, no quiero fallar más por idiota, quiero intentar.
Que delirante es la manera en la que una relación te puede abrir las puertas a la respuesta de otro mundo completamente paralelo. Como una pelea puede quebrar dedos y sacudir cerebros de manera similar. No, no soy fácil, pero sí egoísta, si busco mi libertad y nada más.
¿De qué escapo y quién me persigue? No lo sé.